Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que procede de Dios (1 Cor 2, 12), el Espíritu de su Hijo, que Dios envió a nuestros corazones (Gal 4,6). Y por eso predicamos a Cristo crucificado, escándalo para los judíos y locura para los gentiles, pero para los llamados, tanto judíos como griegos, es Cristo fuerza de Dios y sabiduría de Dios (1 Cor 1,23-24). De modo que si alguien os anuncia un evangelio distinto del que recibisteis, ¡sea anatema! (Gal 1,9).
BIENVENIDO A ESTE BLOG, QUIENQUIERA QUE SEAS
miércoles, 19 de marzo de 2014
EL PECADO, causa de todos los males (José Martí)
Este artículo puede leerse en mi otro blog: "El blog católico de José Martí (2)" (Posteriormente "Il. Para ello pincha aquí
Suscribirse a:
Entradas (Atom)