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miércoles, 31 de mayo de 2017

Aclarando ideas (VIII): Homenaje a Lutero [Froilán-Aulé]

Hace ya más de tres años, en la entrevista a Eugenio Scalfari  aparecida en "La Repubblica" del 1 de octubre de 2013decía el Papa Francisco:

"...Los padres conciliares (se refería al Concilio Vaticano II) sabían que abrirse a la cultura moderna significaba ecumenismo religioso y diálogo con los no creyentes. Desde entonces muy poco fue hecho en aquella dirección. Yo tengo la humildad y la ambición de querer hacerlo". 

Y vaya si lo hace, porque estamos como nunca antes, con gestos de hermandad hacia todos y así "uniéndonos en lo que no divide". El culmen ha sido la visita a Suecia para conmemorar los 500 años del cisma de Lutero

Pero, ¿qué es aquello que divide? Nada menos que la verdad sobre Cristo y su Iglesia[Por eso] Unión con los que han dividido, los cismáticos, y dureza para los fieles católicos que defienden la ortodoxia.

ELOGIO A LUTERO

Las implicancias del elogio a Lutero y las sospechas acerca de la intención son grandísimas. El elogio de Francisco fue en el viaje de retorno de Armenia, el 26 de junio del año 2016. Figura en el sitio oficial del Vaticano. 

Estas fueron sus palabras"Creo que las intenciones de Martin Lutero no estuvieron equivocadas; era un reformador. Quizás algunos métodos no eran propiamente un modelo para imitar. Había corrupción en la Iglesia, había mundanidad, había apego al dinero y al poder. Y él protestó por eso. Luego, era inteligente y dio un paso adelante justificando el porqué hacía todo eso: sobra [es suficiente] la doctrina de la justificación. Sobre este punto tan importante no se había equivocado. Él hizo una medicina para la Iglesia".


Aquí el Papa Bergoglio presenta a Lutero como un reformador de costumbres, un reformador moral, cosa que el mismo Lutero negó ser. 
Él fue el reformador herético de la doctrina y ésta es la verdad

[...]


Ciertamente que hubo escándalos en la Iglesia de aquel tiempo, pero los escándalos de Lutero, hombre rudo, carnal y vulgar, no fueron de menor alcance, antes bien fue lo contrario. No vale la pena adentrarse en el tema de los escándalos de la Iglesia ni tampoco de los escándalos de Lutero sino ir al punto más inquietante que es decir que:



¡Lutero sobre el tema de la justificación tenía razón!

Afirmar eso es borrar de un golpe las enseñanzas de la Iglesia acerca del libre albedrío y la necesidad de las obras [...] cancelar la condena de Trento. Porque para Lutero la justificación viene por la sola fe en Jesucristo prescindiendo de las obras y de la cooperación del pecador con la gracia


Extraño que, justamente, Jorge Mario Bergoglio pueda decir que Lutero tenía razón en ese puntoExtraño porque tantas veces le gusta recordar el pasaje de Mateo 25, en el que el Señor viniendo en su gloria juzgará a unos y otros de acuerdo a las obras (Cf. Mt 25: 31s). 

Lutero, lo recordamos, negaba además del Magisterio (Sola Scriptura y libre examen de las Escrituras), el sacerdocio ministerial  y  sosteniendo que la salvación viene por la sola fe consecuentemente niega los sacramentos, excepto el bautismoExtraño también porque siendo Rector del Colegio San José, el Padre Jorge Mario Bergoglio en un escrito condenó a Calvino y a Lutero.

Pues con tanto elogio y festejo (¡¡ ...!!) por los 500 años del cisma, la sospecha, más que fundada, es que el próximo ataque sea a la Eucaristía y al sacerdocio ministerial. [...] ¿Quién podría jamás imaginar que habría un hombre en la cima de la Iglesia Católica que fuese a celebrar el cisma de hace cinco siglos atrás? 

¡Recordar el 31 de octubre de 1517, cuando el monje agustino Martin Lutero clavó sus 95 tesis en la puerta de la iglesia de Wittenberg! Y, en efecto, el escenario que hemos visto en Lund, el 31 de octubre, con la "obispa" luterana y el acto paralitúrgico ha sido surrealista.

Sin embargo, el homenaje a la Reforma comenzó el pasado 13 de octubre de 2016, cuando Lutero atravesó las puertas del Vaticano y una estatua suya presidió el encuentro de Bergoglio con un grupo de peregrinos luteranos



¡Precisamente el 13 de octubre, aniversario de la última aparición de la Virgen en Fátima, fecha que pasó bajo silencio!

En aquel encuentro, una vez más Francisco condenaba el proselitismo como "veneno" mientras exaltaba a "los santos reformadores"; era más o menos como canonizar al gran hereje que dividió la Iglesia y provocó guerras de religiones que desangraron Europa. [...] Antes que el viaje a Suecia fuese definido, el Cardenal Müller advertía: "Nosotros los católicos no tenemos ningún motivo para festejar el inicio de la Reforma que llevó al cisma de la cristiandad occidental"  [hablando en un acto con los obispos de Chile].

En cambio, Francisco fue y se encontró con la Federación luterana mundial. Poco antes salía un documento firmado por una comisión católica-luterana titulado "Del conflicto a la comunión" donde se afirma que nosotros católicos somos también culpables de haber quebrado la unidad de la Iglesia y que el programa reformador de Lutero constituye un desafío espiritual y teológico para nuestro tiempo (sic!).

En Lund Francisco dijo"Es con gratitud que reconocemos que la Reforma ha contribuido a dar mayor centralidad a la Sagrada Escritura en la vida de la Iglesia"[Obviamente, no dijo que para los luteranos y todos los protestantes no existe una lectura de la Sagrada Escritura con la Iglesia y desde la Iglesia, porque ellos no tienen ni reconocen Magisterio alguno sino el libre examen de la Palabra de Dios].

"La experiencia espiritual de Martin Lutero nos interpela y nos recuerda que no podemos hacer nada sin Dios. El mensaje de Lutero está justo en el descubrimiento de un "Dios misericordioso". [¡Como si la Iglesia con todo su Magisterio, ¡sus Padres y sus santos, rechazados y negados por Lutero, habría debido esperar a Lutero para descubrir que sin Cristo nada podemos y que Dios es misericordioso!]

Y luego en la Declaración conjunta se puede leer"Estamos profundamente agradecidos por los dones espirituales y teológicos recibidos a través de la Reforma." [¿Cuáles dones espirituales y teológicos? ¿Acaso la influencia racionalista de Karl Barth?] 

O bien"Muchos miembros de nuestras comunidades aspiran a recibir la Eucaristía en una única mesa, como concreta expresión de la plena unidad"


Es decir, promoción de la intercomunión con los protestantes [...] Ahora bien, de acuerdo a la declaración se trataría del deseo que los protestantes accediesen a la comunión eucarística en nuestras Misas sin estar en comunión con la Iglesia. ¡Esto no es posible! 

Anteriormente, en ocasión de su visita a la comunidad luterana de Roma, un año atrás, a la pregunta de una señora protestante, mujer de un católico, acerca de la posibilidad de poder participar, junto a su esposo, en la Eucaristía, Francisco respondió: "Dejo la pregunta a los teólogos". Luego dijo que él no podía dar permiso para recibir la Eucaristía, pero que ella debería haberlo "hablado con el Señor y avanzar" [¿Qué significa exactamente esto? ¿Que si su conciencia le dice que puede hacerlo, entonces podría hacerlo?]

[...] El cardenal Robert Sarah, Prefecto del Culto divino, corrigió al pontífice diciendo: "No es una cuestión de seguir la propia conciencia"; "La Eucaristía es sólo para los católicos"

El obispo kazakistano Athanasius Schneider dijo que "la Iglesia debe ser absolutamente clara con los protestantes, no escondiendo nada". Agregó que "cualquier gesto que no sea claro, que no sea sincero, que sea ambiguo, jamás ayudará al verdadero ecumenismo en ningún nivel que sea"

Dijo también Monseñor Schneider que "los pastores deben ser muy prudentes en sus declaraciones y no crear ambigüedades y confusión entre la gente llevándolas a creer que las doctrinas católicas y protestantes son fundamentalmente las mismas con sólo pequeñas diferencias"

[Efectivamente, no hay pequeñas sino muy grandes diferencias entre estas doctrinas, como se ha visto antes]


Continuará

Aclarando ideas (VII): El desafío de la Ley de Dios en Amoris Laetitia (Froilán-Aulé)

Abandono de las exigencias de la fe

Tales exigencias son las de nuestro Señor Jesucristo quien nos dice que seguirlo a Él es ir despojándose de toda adherencia material, de todo apego desordenado a las personas y de toda comodidad y marchar sin mirar al pasado. 

La puerta que lleva al Reino es estrecha y la Ley es más radical que lo que nosotros los hombres querríamos. "Os ha sido dicho" pero "yo os digo" (Cf. Mt 5) y a cada mandamiento lo descubre en todo su rigor y exigencia. 

Sin embargo, ahora se nos dice que son ideales que pocos pueden alcanzar y, por tanto, hay que matizar, aligerar, acompañar o, como algún "teólogo" peregrinamente sugirió, volver a la ley mosaica donde el repudio a la mujer estaba contemplado (¡!).

La Amoris Laetitia pretende "humanizar" la ley, hacerla adaptable a esta época de tantas parejas de hecho e irregulares para que puedan acceder a la comunión y no se sientan excluidas por causa del pecado

La pregunta es de rigor: ¿Por qué es posible ahora llegar a desafiar la misma ley de Dios, las palabras clarísimas de Jesucristo? 

Simplemente porque para Amoris Laetitia -si la ley presenta un ideal difícilmente alcanzable para muchos- entonces no existe la sobrenaturalidad y por tanto la gracia no cuenta … 

Precisamente, lo único que hace posible cumplir con la Ley es la gracia.  Esa gracia santificante que le es dada a cada uno por el bautismo y que cuando se la pierde ahí está el otro sacramento, la confesión, para recuperarla toda vez que el penitente sea tal, que se acerque arrepentido y - ¡claro está! - con el propósito de no seguir pecando.


Continuará

lunes, 29 de mayo de 2017

El carácter satánico de los "ritos masónicos" (por Alberto Bárcena) [Original inglés traducido por mí al español]


Duración 2:51 minutos

EN INGLÉS

Alberto Bárcena is a history professor at the prestigious Catholic Universidad Ceu San Pablo in Madrid, Spain, and a specialist for Freemasonry. Speaking to Infocatolica he denounced the Satanic character of the Masonic rites. Quote, "Inside of Freemasonry they adore Lucifer, although he is never called this way." 

Bárcena explains that there is a moment in the Masonic initiation ritual when the Masons trample a crucifix and say: "This cross, symbol of death and destruction, may disappear from the world." 

According to Bárcena the UN and other entities like the Bilderberg group promote the goals of Freemasonry, which through social engineering aim at destroying the family and national sovereignty. 

Bárcena says that in Freemasonry Lucifer is the one who brings knowledge to men in paradise, and God is the one who expels men from paradise. For the Masons, Lucifer is an ally of man. 

Freemasonry is today less secretive than it used to be. Bárcena recounts that the college of lawyers of Madrid convened a conference under the title "Catholics and Masons". The president of the Supreme Masonic Council of the 33rd degree was invited. He was flanked by a Jesuit, who supported his Masonic theses. 

Bárcena explains that the former Spanish Socialist government of José Luis Zapatero implemented a secular policy almost dictated by the lodge Grand Orient of France. He adds that the present government of the centre-right People's Party under Catholic prime minister Mariano Rajoy is not any better. Quote, "Rajoy has eliminated almost all pro-lifers from his government and from the party." 

Bárcena points out that the Spanish Caudillo Francisco Franco, a fervent Catholic, who saved the Church from being slaughtered by the Communists, instituted between 1940 and 1963 a tribunal in order to eradicate Masons and Communists and did not allow for Masons to assume public offices.

EN ESPAÑOL

Alberto Bárcena es profesor de historia en la prestigiosa Universidad Católica CEU San Pablo de Madrid (España) y especialista en Masonería. Hablando con Infocatólica [un artículo de lectura aconsejable] denunció el carácter satánico de los ritos masónicos. Cita: "Dentro de la Masonería, ellos adoran a Lucifer, aunque éste nunca es llamado así".

Bárcena explica que hay un momento en el ritual masónico de iniciación en el que los masones pisotean un crucifijo y dicen: "Esta cruz, símbolo de muerte y destrucción, debe desaparecer del mundo".

Según Bárcena, la ONU y otras entidades como el grupo Bilderberg promueven los objetivos de la Francmasonería, los cuales a través de la ingeniería social, tienen como objetivo destruir la familia y la soberanía nacional.

Bárcena dice que en la Francmasonería Lucifer es el único que trae el conocimiento a los hombres en el paraíso, y Dios es quien expulsa a los hombres del paraíso; para los masones Lucifer es un aliado del hombre.

La masonería es hoy menos secreta de lo que solía ser. Bárcena cuenta que el Colegio de Abogados de Madrid convocó una conferencia bajo el título de "Católicos y Masones". Se invitó al presidente del Consejo Supremo Masónico grado 33 [grado máximo que se puede alcanzar en la masonería] que estaba al lado de un jesuita que apoyaba sus tesis masónicas.

Bárcena explica que el ex gobierno socialista español de José Luis Zapatero implementó una política secular casi dictada por la Logia Grand Orient de Francia. Añade que el actual gobierno de centro-derecha del Partido Popular, gobernado por el Presidente "católico" Mariano Rajoy no es mucho mejor. Cita: "Rajoy ha eliminado a casi todos los pro-vida de su gobierno y del partido".

Bárcena señala que el Caudillo español Francisco Franco, ferviente católico que salvó a la Iglesia de ser masacrada por los comunistas, instituyó entre 1940 y 1963 un tribunal con el fin de erradicar Masones y Comunistas y no permitió que los masones accedieran a cargos públicos.


[Traducción: José Martí]

LOS VIENTRES DE ALQUILER SON UNA ABERRACIÓN, LA FECUNDACIÓN IN VITRO, TAMBIÉN (Eulogio López)

Duración 1:45 minutos

ASCENSIÓN DEL SEÑOR A LOS CIELOS Y MISIÓN PRINCIPAL DE LA IGLESIA (Padre Santiago Martín)

Duración 13:03 minutos

NOTA: Sobre la Ascensión del Señor a los Cielos, se puede leer también un artículo que escribí hace tres años y que se encuentra en mi otro blog. Pinchar aquí.

TEXTO COMPLETO DE LA RECIENTE ENTREVISTA DEL CARDENAL MÜLLER CON EWTN (traducido al español por Secretum Meum Mihi)


 

 

sábado, 27 de mayo de 2017

Apariciones privadas a Sor Lucía de Fátima (P. José María Mestre)

1º Difusión de la devoción reparadora
al Corazón Inmaculado de María
El 10 de diciembre de 1925, siendo Sor Lucía postulante en el Convento de las Doroteas en Pontevedra, se le apareció la Virgen con el Niño Jesús sobre una nube de luz. La Virgen puso su mano sobre el hombro de Lucía, mientras en la otra sostenía su Corazón rodeado de espinas. El Niño Jesús le dijo entonces:
«Ten compasión del Corazón de tu Santísima Madre. Está cercado de las espinas que los hombres ingratos le clavan a cada momento, y no hay nadie que haga un acto de reparación para sacárselas».
Inmediatamente la Santísima Virgen agregó:
«Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas, que los hombres ingratos me clavan sin cesar con blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme, y di que a todos los que durante cinco meses en el primer sábado se confiesen, reciban la Sagrada Comunión, recen el Rosario y me hagan compañía durante 15 minutos meditando en los misterios del Rosario con el fin de desagraviarme, yo prometo asistirles en la hora de la muerte con las gracias necesarias para su salvación».
¿Por qué esta voluntad del Cielo de pedir la comunión reparadora de los cinco primeros sábados de mes? Nuestro Señor se lo manifestó a Sor Lucía el 29 de mayo de 1930, estando ella en Tuy:
«El motivo de los cinco sábados de mes es muy sencillo, y es que hay cinco clases de ofensas y blasfemias contra el Corazón Inmaculado de María: 
1º las blasfemias contra su Inmaculada Concepción; 
2º las blasfemias contra su Virginidad; 
3º las blasfemias contra su divina Maternidad, negándose a la vez a reconocerla como Madre de los hombres; 
4º las blasfemias de los que intentan infundir públicamente en el corazón de los niños la indiferencia, el desprecio y el odio contra esta Madre Inmaculada; 
5º las ofensas de quienes ultrajan directamente su sagrada Imagen».
Varias veces volvió el Señor a manifestarle a Sor Lucía sus ardientes deseos de establecer en el mundo la devoción reparadora al Corazón de su Santísima Madre. Así lo hizo en marzo de 1939, en Tuy:
«Pide, insiste de nuevo, para que se recomiende la devoción de los primeros sábados del mes en honor al Corazón Inmaculado de María. Se acerca el momento en que el rigor de mi justicia castigará el crimen de muchas naciones».
Igualmente, en mayo de 1943, también en Tuy:
«Deseo ardientemente que se propague en el mundo el culto y la devoción al Corazón Inmaculado de María, porque este Corazón es el imán que atrae todas las almas a Mí, el fuego que irradia sobre la tierra el rayo de mi Luz y de mi Amor, y la fuente inagotable que hace brotar sobre la Tierra el agua viva de mi Misericordia».
Sor Lucía quedó tan aferrada a esta amable devoción, que, cumpliendo el encargo que le diera Nuestro Señor, no dejaba de recomendarla reiteradamente por carta a sus corresponsales. Así, por ejemplo:
«Querría que me diese usted el consuelo de adoptar una devoción que le es muy agradable a Dios, y que nuestra querida Madre del Cielo ha reclamado. La adopté desde que tuve conocimiento de ella, y deseo que todo el mundo la practique… Consiste en hacer lo que está escrito en esta pequeña estampa… Los quince minutos [de meditación] es tal vez lo que más podría costarle, pero es fácil. ¿Quién no sabría pensar en los misterios del Rosario…, permanecien­do en los santos pensamientos [que sugiere cada misterio] junto a la más tier­na de las madres?» (Carta a su madre María Rosa, 24 de julio de 1927).
«Espero que Jesús haga de ellos [el Canónigo Formigao y el Padre Rodrigues, que desean predicar esta devoción] dos ardientes apóstoles de la devoción reparadora al Corazón Inmaculado de María. No imagina Su Reverencia qué grande es mi alegría de pensar en el consuelo que van a recibir, por esta amable devoción, los Sacratísimos Corazones de Jesús [y de María], y en el gran número de almas que se salvarán por medio de ella. Digo que se salvarán, porque hace poco tiempo que Dios, en su infinita misericordia, me ha pedido ofrecer reparación, con mis oraciones y sacrificios, al Corazón Inmaculado de María, e implorar el perdón y la misericordia en favor de las almas que blasfeman contra Ella, porque a esas almas la divina Misericordia no quiere perdonarlas sin reparación» (Carta al Padre Aparicio, 31 de marzo de 1929).
2º El pedido de consagración de Rusia
al Corazón Inmaculado de María
Estrechamente vinculada a la devoción reparadora al Corazón de María está el pedido de que el Papa consagre Rusia a su Corazón Inmaculado. Este pedido vino a hacerlo María Santísima en Tuy el 13 de junio de 1929, en la célebre Teofanía Trinitaria, que Sor Lucía describió como sigue:
«De repente toda la Capilla [de las Hermanas Doroteas] se iluminó con una luz sobrenatural, y apareció sobre el altar una Cruz de luz que llegaba hasta el techo. En la claridad de la parte superior se podía ver el rostro de un hombre y su cuerpo hasta la cintura [Dios Padre]. En el pecho había una paloma de luz [el Espíritu Santo], y clavado en la Cruz estaba el cuerpo de otro hombre [Nuestro Señor Jesucristo]. Por encima de la cintura, suspendidos en el aire, podía ver un cáliz y una gran Hostia, en la cual caían gotas de sangre del rostro de Jesús crucificado y de la llaga de su costado. Estas gotas, escurriéndose sobre la Hostia, caían en el cáliz. Debajo del brazo derecho de la Cruz estaba Nuestra Señora. Era Nuestra Señora de Fátima, con su Corazón Inmaculado en su mano izquierda, sin espada ni rosas, pero con una corona de espinas y llamas. Debajo del brazo izquierdo de la Cruz había unas grandes letras, como si fuesen de agua cristalina, que corrían sobre el Altar formando estas palabras: Gracia y Misericordia. Entendí que se me mostraba entonces el Misterio de la Santísima Trinidad, y sobre este misterio recibí luces que no me es permitido revelar. La Virgen me dijo entonces: Ha llegado el momento en que Dios pide al Santo Padre que, en unión con todos los Obispos del mundo, haga la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado, prometiendo salvarla por este medio».
A inicios del año 1930, Nuestro Señor manifestaba a Sor Lucía que los dos pedidos –de la consagración de Rusia y de la devoción de los primeros sábados de mes– debían ser transmitidos simultáneamente al Sumo Pontífice en Roma. Igualmente el 29 de mayo de 1930, después de explicarle a Sor Lucía los motivos de la devoción reparadora de los cinco primeros sábados, Nuestro Señor prometía poner fin a la persecución bolchevique contra la Iglesia católica si el Papa hacía y mandaba hacer a todos los Obispos del mundo un acto solemne y público de reparación y de consagración de Rusia a los Sagrados Corazones de Jesús y de María, y prometía al mismo tiempo aprobar y recomendar la práctica de la devoción reparadora al Corazón Inmaculado de María.
Ante la indecisión del Papa Pío XI a cumplir los pedidos del Cielo, y su política diplomática de «Apertura al Este»Nuestro Señor le hacía a Sor Lucía, en agosto de 1931 en Rianjo, la siguiente confidencia:
«Mucho me consuelas pidiéndome la conversión de estas pobres naciones [Rusia, España y Portugal]. Pídesela también a mi Santísima Madre … Haz saber a mis ministros que, dado que siguen el ejemplo del rey de Francia, retrasando la ejecución de mi pedido, lo seguirán también en la desgracia. Como el rey de Francia, se arrepentirán y harán lo que Yo he pedido, pero ya será demasiado tar­de: Rusia habrá esparcido sus errores por el mundo, provocan­do guerras y persecuciones contra la Iglesia. El Santo Padre tendrá mucho que sufrir. Pero nunca será demasiado tarde para recurrir a Jesús y a María».
Sor Lucía volvió a menudo sobre este juicio terrible de Nuestro Señor, ratificado con una profecía firme pero angustiosa. Y en mayo de 1936, preguntándole a Nuestro Señor por qué no quería convertir a Rusia sin que el Papa la consagrara al Corazón de María, le contestó el Señor:
«Porque quiero que toda mi Iglesia reconozca esta consagración como un triunfo del Corazón Inmaculado de María, con el fin de extender luego su culto y colocar así, al lado de la devoción a mi Divino Corazón, la devoción a este Corazón Inmaculado».
A la exclamación de Sor Lucía: «¡Pero el Santo Padre nunca me creerá, Señor, si Tú no lo mueves con una especial inspiración!», respondió:
«¡El Santo Padre! ¡Ruega mucho por el Santo Padre! El hará esta consagración, pero ya será demasiado tarde. Sin embargo, el Corazón Inmaculado de María salvará a Rusia, que le ha sido confiada».
En este sentido Nuestro Señor decía a Sor Lucía, el 22 de octubre de 1940:
«Ruega por el Santo Padre; sacrifícate para que su corazón no sucumba a la amargura que lo oprime. Las persecuciones irán en aumento; castigaré a las naciones con la guerra y la escasez; la persecución contra mi Iglesia recaerá particularmente sobre mi Vicario en la Tierra. El Santo Padre podría obtener que estos días de tribulación se acortaran si cumpliera mi deseo de consagrar el mundo entero al Corazón Inmaculado de María, con mención especial de Rusia».
El PapaPío XII, el 31 de octubre de 1942consagró el mundo al Corazón Inmaculado de María, pero sin hacer la mención especial de Rusia que el Señor había reclamado. Sor Lucía declaraba al año siguiente:
«El Señor ha aceptado la consagración del mundo en octubre de 1942 al Corazón Inmaculado de María, y promete poner rápido fin a la guerra. Mas, como fue incompleta según su pedido, la conversión de Rusia no ocurrirá por ahora».
El 15 de julio de 1946, en una entrevista al escritor americano William Thomas Walsh, Sor Lucía declaraba:
«Lo que Nuestra Señora quiere es que el Santo Padre y todos los obispos consagren Rusia a su Corazón Inmaculado, en una ceremonia especial. Si se hace esta consagración, la Santísima Virgen convertirá a Rusia, y la paz rei­nará en el mundo. Si no, los errores de Rusia se esparcirán por todas partes». (Ver adjunto al pie del artículo)
en mayo de 1952 la Santísima Virgen le decía a Sor Lucía:
«Haz saber al Santo Padre que sigo esperando la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado. Sin esta consagración, Rusia no se convertirá, ni el mun­do podrá gozar de paz».
Tampoco las dos consagraciones hechas por Juan Pablo II en Fátima, el 13 de mayo de 1982 y el 25 de marzo de 1984, cumplieron los deseos del cielo, por faltar en ellos la mención explícita de Rusia, y no haberse realizado en unión con todos los obispos del mundo en una ceremonia especial de desa­gravio.

De modo que, aún hoy, está pendiente dicha consagración. Así lo hizo saber reiteradamente Sor Lucía a las personas que la visitaban en el Carmelo de Coímbra, a pesar de la reserva que le imponía la obediencia.


Padre José María Mestre